Para huir del mundo. Preparo mi cigarrillo… Lo hago lentamente, muy rápido, pero muy lento para que no pierda su carga.
Reviso bien su carga -que todo ande bien- que sus pepas no suban y que sus hojas vuelan rápidamente.
Está listo, con un pequeño nudo húmedo cierro bien una puerta y dejó libre la otra.
Lo tomó lentamente y lo traigo a mi boca, aire duro para que las turbinas se enciendan o «carburen» como dice mi amigo…
Estornudo…( para huir del mundo)
El humo se comienza a disipar por el cielo…este man por fin su viaje comenzó.
Comienza el viaje pero algo ocurre, algo salió mal, algo no es como siempre…este man no me ha llevado a dónde quiero ir.
Este cigarrillo con amor armado me ha llevado a la melancolía, a la constante pregunta con la inquietud más grande… al no sé…
En pueblo villano leemos: Para huir del mundo.