Ainicios de mi carrera llega a mí, un libro peculiar y controversial, este libro que guardo con recelo, es la vida de Charles Bukoswki interpretado por “el alter ego” de este escritor desarrollado en un pasaje muy bien conocido por los hombres llamado MUJERES.

La vida es contada por Henry Chinaski (Charles Bukoswki), escritor a quien llega la fama hasta muy tarde de su vida; tener 50 años es algo difícil, pero comprobar que el sexo no es amor, sin importar las incontables mujeres que pasaron por este personaje acompañado de cigarrillos y licor, hace que las experiencias y esos encuentros fortuitos tengan otro significado.

Aquellas Mujeres

Es por ello que hago una pequeña referencia a todas las que pasaron…

La intensa que el hombre encuentra, aunque sea una sola vez en su vida, que su posesión es justificada por su apetito sexual -en ocasiones mucho más que el de él- entrando en disputas, peleas que a la larga se lleva a terminar la relación, aunque no siempre se termina cuando el hombre lo dice, ya que ella sigue estando ahí, sobre todo cuando llega una nueva mujer a la vida de uno.

La Profesional

Esa que a veces se encuentra en el camino de su carrera ya sea universitaria o laboral, y que tienen muchas afinidades pero después de un corto o largo camino se vuelve monótona, perdiendo el gusto y de paso el amor construido, porque no tienen diferencias, puntos de desacuerdo, divergencias, disputas que hace que todo sea del mismo matiz.

Las mujeres sin prejuicio social y con ganas de pasarla bien, así son las que siempre se conocen “en su mayoría” en eventos públicos y que al amanecer no se conoce sino el nombre y no tienen mayor interés que el de regresar a la casa, tomarse una ducha y seguir con la vida sin esperar una llamada o un e-mail que propicie un nuevo encuentro.

La Drogadicta

Esa que se encuentra en el camino cuando se está experimentando diferentes sensaciones, en ocasiones está mujer te puede generar un sentimiento profundo, que puede ser por el exceso de drogas, no siempre esta mujer será el amor pero en algunas ocasiones te enseña a conocerte y en mínimas ocasiones, haces que ella te confunda con el amor de su vida.

Y podría hablar de otras mujeres que han pasado por la vida de esté escritor, cómo: la que abandona, la segunda opción o la confiable y porque no la tóxica…

A veces suele ser un ideal o una utopía, por la que muy pocos se atreven a arriesgarse y es encontrar a la mujer perfecta física y emocionalmente, tomando tan sólo un instante en darte cuenta que es todo lo que siempre has buscado, sin importar la edad, porque Henry Chinaski encuentra a esa mujer y le es fiel a ella y sólo a ella después de haber sido esposo, padre y amante.

Es que enamorarse a los 50 años es todo un reto, pero esto es posible, si el amor de esta mujer perfecta es leal a ti.